El Escudo de armas de la República de Colombia es el emblema heráldico que representa al país, y que junto con la bandera y el himno nacional, tiene la categoría de símbolo patrio.1
El actual emblema y sus elementos constituyentes tienen sus orígenes en el escudo aprobado por medio de la ley 3 del 9 de mayo de 1834, siendo presidente de la República de la Nueva Granada el general Francisco de Paula Santander.
Los colores y la disposición de los mismos fueron adoptados y
reafirmados sucesivamente por varios decretos, particularmente los
dictaminados el 17 de mayo de 1924 y 11 de enero de 1934. Finalmente el escudo es reglamentado por medio del decreto 3558 del 9 de noviembre de 1949,
el cual además describe de manera puntual la reproducción de la mayoría
de sus partes. El escudo vigente en la actualidad recoge tanto los
elementos dictaminados en 1834 como los descritos en 1924 y 1949, con sus respectivas mejoras estéticas.
El escudo como símbolo nacional es empleado por el Gobierno e
instituciones estatales, siendo las únicas instituciones que pueden
ostentarlo de forma privativa. En cuanto a su diseño existen diferentes
versiones estilísticas, ya que a pesar de que las leyes y decretos
vigentes describen cómo debe ser su reproducción, lo hacen de forma
incompleta y sin tener en cuenta para ello la ciencia de la heráldica, lo que ha dado lugar a ciertos vacíos que la comunidad en general ha llenado
Cóndor de los Andes
Siempre se ha asociado el
majestuoso cóndor de los Andes con las glorias de
Colombia. Tiene su hábitat en las máximas alturas de
los Andes; es el que vuela a mayor altura.
Tiene gran tamaño, alcanza
hasta 3 metros con las alas extendidas, característica
que explica su alto vuelo. Fue escogido en 1834 como
emblema de libertad y soberanía para el escudo
nacional.
Son proverbiales su majestad y nobleza.
Su
longevidad es un mito, tanto que se le ha llamado " el ave
eterna ". Su fuerza y poderío son formidables.
Se dice que recorre hasta 200 leguas en un día. Solamente vuela en los días de sol. Su plumaje es negro, con visos azulados como el acero, y sus potentes alas están rodeadas de blanco. También es blanca su majestuosa gorguera.
Se dice que recorre hasta 200 leguas en un día. Solamente vuela en los días de sol. Su plumaje es negro, con visos azulados como el acero, y sus potentes alas están rodeadas de blanco. También es blanca su majestuosa gorguera.
Por cientos de años el Cóndor ha
batallado contra la humanidad para sobrevivir. El
Cóndor ha sido amenazado por la cacería,
la deforestación (pérdida de su hábitat), la contaminación
del aire, agua y comida, y la severa reducción de su
fuente de alimento. En 1973, el U.S. Fish and
Wildflife Service (agencia federal para la
protección de peces y animales salvajes) agregó el
Cóndor Andino a la lista de animales en amenaza de
extinción. Aunque todavía no se ha iniciado un censo
oficial del Cóndor Andino, se cree que su población
ha sido disminuida notoriamente y que en Ecuador,
Perú y Venezuela tienen los niveles más bajos.
La Orquídea
es la flor Nacional. Concretamente, la variedad
denominada Cattleya Trianae. LLeva este
nombre en honor del naturalista Colombiano José
Jerónimo Triana. Fue escogida como flor Nacional
según un concepto emitido por la Academia
Colombiana de Historia en 1.936, aún cuando no ha
sido consagrada oficialmente por ley. Es sabido
que las Orquídeas Colombianas están señaladas
entre las más hermosas del mundo. La estructura
y los colores de la Cattleya Trianae son de una
extraordinaria belleza.
El
Árbol
La Palma de
Cera del Quindío es el Árbol Nacional de
Colombia. Su nombre científico es "
Ceroxylon Quindiuense ". Es una palmera de
imponente belleza, extraordinaria fortaleza y
legendaria longevidad. Es exclusiva de los Andes
Colombianos. Alcanza alturas hasta de 70 metros.
Fue escogida como árbol Nacional de Colombia por
la comisión preparatoria del III Congreso
Suramericano de Botánica, celebrado en Bogotá
en 1.949. Posteriormente fue adoptado oficialmente
como símbolo patrio por la ley 61 de 1.985.
Bandera de Colombia
Proporción
|
2:3
|
Adopción
|
|
Colores
|
La Bandera Nacional de
la República de Colombia es el pabellón que
representa al país, y que junto con el escudo
y el himno nacional, tiene la categoría de símbolo patrio.
Consiste en un rectángulo dividido en tres franjas coloreadas con los colores
primarios, ocupando la superior la mitad de éste.
El pabellón de Colombia tiene
su origen en la composición tricolor creada en 1801 por el General Francisco
de Miranda, quien describía en su diario militar el uso de los
colores primarios como bandera para representar a las naciones latinoamericanas
que en aquel entonces estaban en proceso de independencia y terminó
representando a la Gran Colombia.1
Estos colores fueron adoptados
de forma sucesiva por los Congresos de la Gran Colombia, el 17 de diciembre de 1819, y de la República de la Nueva Granada, el 9 de mayo de 1834. La disposición actual de los
mismos fue adoptada de forma definitiva el 26 de noviembre de 1861, y su reglamentación dada por medio
de los decretos 861 del 17 de
mayo de 1924 y 62 del 11 de enero de 1934.2
La bandera como símbolo
nacional es empleada por el Gobierno e instituciones estatales, con distintas
variantes en su confección según el uso que se le dé por parte de los cuerpos
diplomáticos, civiles o militares.
- Amarillo: representa la riqueza del suelo colombiano, así como el sol, fuente de luz, y la soberanía, la armonía y la justicia.
- Azul: representa el cielo que cubre la Patria, los ríos y los dos océanos que bañan el territorio colombiano.
- Rojo: representa la sangre vertida por los patriotas en los campos de batalla para conseguir la libertad, la que significa amor, poder, fuerza y progreso.
Los colores exactos del pabellón aún no se han establecido por ley.
Sin embargo, tentativamente se recomienda utilizar los siguientes, que
son aprobados por la FIAV
- oro:
- ¡Oh gloria inmarcesible!
- ¡Oh júbilo inmortal!
- ¡En surcos de dolores
- el bien germina ya!
- I
- ¡Cesó la horrible noche! La libertad sublime
- derrama las auroras de su invencible luz.
- La humanidad entera, que entre cadenas gime,
- comprende las palabras del que murió en la cruz.
- II
- "¡Independencia!" grita el mundo americano;
- se baña en sangre de héroes la tierra de Colón.
- Pero este gran principio: "El rey no es soberano",
- resuena, y los que sufren bendicen su pasión.
- III
- Del Orinoco el cauce se colma de despojos;
- de sangre y llanto un río se mira allí correr.
- En Bárbula no saben las almas ni los ojos,
- si admiración o espanto sentir o padecer.
- IV
- A orillas del Caribe hambriento un pueblo lucha,
- horrores prefiriendo a pérfida salud.
- ¡Oh, sí! De Cartagena la abnegación es mucha,
- y escombros de la muerte desprecia su virtud.
- V
- De Boyacá en los campos el genio de la gloria
- con cada espiga un héroe invicto coronó.
- Soldados sin coraza ganaron la victoria;
- su varonil aliento de escudo les sirvió.
- VI
- Bolívar cruza el Andes que riega dos océanos;
- espadas cual centellas fulguran en Junín.
- Centauros indomables descienden a los Llanos,
- y empieza a presentirse de la epopeya el fin.
- VII
- La trompa victoriosa en Ayacucho truena;
- y en cada triunfo crece su formidable son.
- En su expansivo empuje la libertad se estrena,
- del cielo americano formando un pabellón.
- VIII
- La Virgen sus cabellos arranca en agonía
- y de su amor viuda los cuelga del ciprés.
- Lamenta su esperanza que cubre losa fría,
- pero glorioso orgullo circunda su alba tez.
- IX
- La patria así se forma, termópilas brotando;
- constelación de cíclopes su noche iluminó.
- La flor estremecida, mortal el viento hallando,
- debajo los laureles seguridad buscó.
- X
- Mas no es completa gloria vencer en la batalla,
- que al brazo que combate lo anima la verdad.
- La independencia sola al gran clamor no acalla;
- si el sol alumbra a todos, justicia es libertad.
- XI
- Del hombre los derechos Nariño predicando,
- el alma de la lucha profético enseñó.
- Ricaurte en San Mateo en átomos volando,
- "Deber antes que vida", con llamas escribió.